“Si comprender es imposible, conocer es necesario porque lo sucedido puede volver a suceder, las conciencias pueden ser seducidas y obnubiladas de nuevo, las nuestras también.
Por ello, meditar sobre lo que pasó es deber de todos” Primo Levi
"60.000 Marcos es lo que nos cuesta este discapacitado a lo largo de su vida. Este dinero es tambien vuestro”.
Este blog quiere ser un medio de información y sensibilización para todos los profesionales de la salud y cualquier persona interesada en los desmanes realizados por médicos y otros profesionales durante la era nazi.
Dentro de la infinidad de medidas segregadoras y excluyentes dictadas por los nazis para su cumplimiento en Alemania y en todos los países ocupados era la prohibición de sentarse en ciertos bancos, en salir a la calle a ciertas horas, o de ir al colegio. Recordemos que médicos y abogados fueron excluidos de la profesión. Los niños judíos no podían tener mascotas ni bicicletas y las familias judías no podían tener aparatos de radio.
Niños franceses jugando un parque "prohibido para los judios"
Banco de un parque en la Alemania nazi: "Sólo para arios"
Pero una de las medidas más sorprendentes es la prohibición de bañarse en lagos o de entrar en piscinas públicas.
¿Que está pasando en el mundo?
Imagen de un libro de lectura infantil "Judios, no sois bienvenidos" (1935)
Los judíos no son aquí bienvenido (1935)
Entrada a una piscina pública en Alemania "Prohibido a los judíos"
Hay historias que parecen sacadas de la imaginación, pero son totalmente reales.
Hemos comentado que en torno a 10000 españoles fueron deportados a los campos nazis. Hubo españoles casi en la práctica totalidad de dichos campos, aunque fue Mauthausen el campo que albergó el mayor número.
Los deportados fueron utilizados como mano de obra esclava y concretamente en algunas zonas su trabajo fueron utilizados para reforzar fortificaciones o construir trincheras, casamatas o líneas defensivas.
El único territorio británico que fue ocupado por las tropas alemanas fueron las Islas del Canal de la Mancha (Jersey, Guernsey y Alderney). Allí se fortificaron las islas con el fin de prevenir el ataque de los aliados.
Una imagen insólita: un bobby inglés da instrucciones a un soldado alemán ocupante
Y alli fueron llevados españoles. Aunque la cifra concreta de deportados es desconocida, Martí Crespo en su libro: Esclavos de Hitler, menciona un total aproximado de 11800 personas de diferentes nacionalidades, entre ellos 1500-2000 españoles. Estos procedían de Francia y fueron capturados por los alemanes tras formar parte de las Compañias francesas de Trabajadores Extranjeros. Otros españoles fueron directamente capturados por los alemanes y llevados a las Islas del Canal. Los españoles encuadrados como trabajadores esclavos en la organización Todt fueron los encargados de llevar a cabo las fortificaciones de la Muralla del Atlántico.
En la Isla de Jersey llegó a haber 19 campos y en la de Guernsey 4, dónde llegó a haber 500 españoles.
Las condiciones en las que vivieron los deportados tanto españoles como polacos, o soviéticos fueron totalmente deplorables. Como siempre, frío, hambre, castigos y explotación hasta la muerte.
Martí Crespo cuenta en su libro la historia de Vicente Gasulla Solé, que actuó como un improvisado enfermero que ayudó a otros deportados. Con medios muy precarios y escasos intentaban ayudar a otros, como siempre, la solidaridad. Había incluso dos médicos llamados Terradas y García.
Las islas del Canal fueron abandonadas por los alemanes y cuando llegaron nuevamente los británicos metieron en campos otra vez a los trabajadores esclavos, ya que ¡habian colaborado con los nazis!
La II Guerra Mundial acabó y alguno de los españoles sobrevivientes se establecieron en Francia o incluso se quedaron a vivir en las islas. En su país como siempre: el olvido.
Uno de los sobrevivientes españoles, Francisco Font, conoció a una joven isleña, Catherine Fox, se casaron, y hoy uno de sus hijos, Gary Font, lucha por mantener el recuerdo de todos los trabajadores forzados obligados por los nazis a trabajar hasta la muerte.
Gary Font
Gary Font, preside el homenaje anual a los esclavos de Hitler. Un monumento, Westmount Memorial, recuerda a las 16000 victimas. Todos los años hay representaciones de alto nivel enviadas por los paises representados, España y su gobierno ¿dónde está?
Westmount Memorial
Este post contiene información de la obra de Martí Crespo. Esclavos de Hitler. Republicanos en los campos nazis del Canal de la Mancha.
Entre 1933 y 1945 en la Alemania Nazi, algunos médicos y otros profesionales de la salud participaron en la esterilización y asesinato de pacientes portadores de enfermedades genéticas y mentales, de niños con malformaciones, en experimentos científicos realizados sin consentimiento y en el exterminio de otras personas en función de su condición religiosa, política, cultural o de identidad (opositores, judíos, gitanos, y homosexuales...).
En el momento actual siguen vigentes en la asistencia diaria de los pacientes los mismos aspectos éticos (límites de la investigación, decisiones al principio y final de la vida, relación del médico con el estado, investigación genética). Conocer este período oscuro de la medicina es necesario para evitar errores que avergüenzan a la humanidad en general y a los médicos en particular.