“Si comprender es imposible, conocer es necesario porque lo sucedido puede volver a suceder, las conciencias pueden ser seducidas y obnubiladas de nuevo, las nuestras también.
Por ello, meditar sobre lo que pasó es deber de todos” Primo Levi
"60.000 Marcos es lo que nos cuesta este discapacitado a lo largo de su vida. Este dinero es tambien vuestro”.
Este blog quiere ser un medio de información y sensibilización para todos los profesionales de la salud y cualquier persona interesada en los desmanes realizados por médicos y otros profesionales durante la era nazi.
Siempre en los conflictos hay ejemplos del bien y del mal. Tras varios post hablando del mal, hoy se va a tratar del BIEN, con mayúsculas. Janusz Korczack es un buen ejemplo.
Nacido en Varsovia, su verdadero nombre era Henrik Goldsmitz. Era médico, pedagogo, periodista, profesor universitario, escritor. Siempre mostró interés por los niños más desfavorecidos y creó un orfanato en Varsovia.
Janusz Korczak
Memorial que recuerda a Korczak en Treblinka
Cuando los nazis desalojaron el ghetto y el orfanato le ofrecieron quedarse en el mismo. Korczak rehusó. Dijo a sus niños que se vistieran de la mejor manera posible, representaron una obra de teatro (La oficina de Correos, de Rabindranath Tagore), y cantando al frente de ellos los acompaño a la Umschalagplatz (lugar desde dónde los judíos eran conducidos a los trenes) y de allí junto con sus niños fue a Treblinka, donde sufrió el mismo destino que ellos. Esto lo presenció Irena Sendler, una enfermera polaca que es otro ejemplo del BIEN. Dice Irena Sendler: "Subió al tren por la parte de delante. Llevaba al más pequeño en brazos, y a otro de la mano...Los niños iban vestidos de domingo. Llevaban un uniforme de dril azul. Iban de cuatro en cuatro, a paso ligero, sin detenerse, con dignidad, hacia la plaza de trasbordos: la plaza de la muerte. Y ¿que decía el mundo entonces? ¡El mundo guardaba silencio!...Los niños no sabían nada hasta el momento en que las manos asesinas de los criminales alemanes cerraran las puertas de los vagones con destino a Treblinka. Allí morirían....Los más pequeños aprietan muñecos en sus manitas...Korczak echaba mano de su fantasía para distraer a los niños de aquellas atrocidades. Tenía un gran corazón...Y yo lo vi con mis propios ojos"
Hoy Korczak es un ejemplo del bien. Muchas instituciones y colegios llevan su nombre en todo el mundo. En el memorial de Treblinka no queda nada, sólo bloques de piedra que representan a todos los seres anónimos que perdieron allí su vida. El único bloque que lleva un nombre es el de Janusz Korczak.
Monumento a Korczak en Yad Vashem (Jerusalén)
"Es inadmisible dejar el mundo tal como lo hemos encontrado" Janusz Korczak (1878-1942)
Este es un episodio tampoco muy conocido sobre la participación de los médicos en crímenes durante la II Guerra Mundial.
Por iniciativa de la Kempeitai (policía secreta japonesa similar a las SS nazis) se crean unas unidades destinadas a la investigación de armas químicas y biológicas. Estas investigaciones se llevaron a cabo en los territorios chinos bajo la ocupación de los japoneses y en zonas con gobierno títere, como Manchuria.
El batallón 731 tenía el eufemista nombre de Laboratorio de Investigación, Prevención Epidémica y Suministro de agua y dado que estuvo camuflado en una serrería, los japoneses llamaban a sus victimas "maruta" o tablones de madera. El responsable de esta unidad era Ishii Shiro.
Shiro Ishii, Jefe del Escuadrón 731
En torno a 10.000 personas de origen chino, mongol, coreano o ruso fueron sometidas experimentos con armas biológicas o químicas. También fueron objeto de experimentación prisioneros de guerra, ingleses, australianos y estadounidenses. Se estima en torno a 200.000 las victimas de los diferentes experimentos.
Los experimentos fueron muy parecidos a los realizados por los médicos nazis. La mayoría tenían un fin militar. La realidad siempre supera a la ficción:
vivisecciones, extracción de órganos, cirugías innecesarias, amputaciones y reimplantaciones de miembros.
exposiciones de los prisioneros a situaciones ambientales extremas: frío, presión, obligarles a beber agua salada, cabinas que giraban constantemente.
utilización de prisioneros como blancos humanos.
uso de balas contaminadas con gérmenes.
infección artificial de heridas.
inyección de orina de caballo en los riñones de los prisioneros.
infestación de los prisioneros con pulgas para así obtener pulgas transmisoras de enfermedades.
irradiación con radiaciones ionizantes.
Asimismo diferentes poblaciones sufrieron: lanzamiento de ropas y comida contaminada con parásitos, bombas que contenían gérmenes como el de la peste, pulgas, y transmisión de tularemia.
Un aspecto peculiar de las acciones del escuadrón 731 ha sido el desconocimiento durante años, así como la "conspiración de silencio" que ha rodeado lo sucedido en China. Se piensa por parte del algunos autores que Estados Unidos renunció a investigar lo sucedido a cambio de conocer y aprovecharse de los conocimientos obtenidos por los médicos japoneses (Nie, J-B. The United States cover-up of Japanese wartime medical atrocities: Complicity committed in the national interest and two proposals for contemporary action. The American Journal of Bioethics, 2006; 6(3), 21-33). Una situación similar a la denominada"operación Paperclip".
Unicamente se realizó un pequeño juicio en Habarovsk, (Siberia) en 1949. Se juzgó a 12 militares y entre los cuales había 8 médicos.
Se ha intentado diferenciar lo realizado por los médicos nazis con lo realizado por el Escuadrón 731. Hay pocas diferencias. Durante años se ha sugerido que en los experimentos japoneses no había el ánimo racista que podría haber en los nazis. Gran error, la Kempeitai era una organización ultranacionalista donde había un credo de superioridad racial y consideraban al pueblo chino como una raza inferior.
Memorial de Harbin
Muchos de los componentes del Escuadrón 731 (el más conocido) y de otras unidades similares alcanzaron después de la guerra reconocimientos y distinciones académicas e investigadoras.
Se adjunta un informe sobre las atrocidades realizadas.
Existen diferentes filmes, (Tun Fei Mou o Hei Tai Yang 731, o "Los hombres detrás del sol") y otro titulado Philosophy of a knife, ambos realmente "gore" e inadecuados. Publicarlos supondría un desprecio para las victimas y se correría el riesgo de "banalizar el mal".
Lo realizado por el Escuadrón 731 es otro ejemplo de colaboración de los médicos con el estado utilizando a seres humanos como objetos de experimentación.
El día 27 de enero se conmemora el Dia Internacional de la Memoria del Holocausto. Fue en ese dia del año 1945 cuando las tropas soviéticas liberaron el campo de exterminio de Auschwitz, lugar dónde se asesinó a millones de personas.
El día de la Memoria del Holocausto fue creado por iniciativa de las Naciones Unidas. Muchos países recuerdan en ese día aquellos crímenes con el fin de que no sucedan nunca más. Se honra a las victimas y se les recuerda para que nunca muera su memoria. Cada país tiene su especial celebración, en unos se hacen actos institucionales, y en otros se pone más enfásis en los aspectos de transmisión a las generaciones futuras.
Es un día de recuerdo, de homenaje, y que ha de hacer reflexionar sobre los derechos humanos y la no discriminación por razón de edad, género, religión, cultura, salud, enfermedad o características físicas. El mensaje más importante en la transmisión del Holocausto ha de ser ese, con el fin de que no se repita nunca más un momento en el que el hombre fue "lobo para el hombre".
En Auschwitz y en el resto de campos los perpetradores reían y se relajaban tras el trabajo.
Los perpetradores
Otros eran asesinados no por lo que tenían o no tenían, sino simplemente por lo que eran.
Las victimas. Dos hermanos judíos hungaros (Shril y Zelig) procedentes de la Rutenia Subcarpática momentos antes de ser dirigidos a las cámaras de gas. Estos eran los "enemigos de la raza aria".
Ante una catástrofe como el Holocausto-Shoah-Porrajmos, las personas pueden adoptar diferentes papeles. Hay víctimas, perpetradores y testigos. Los testigos que presencian lo que sucede pueden pasar a ser perpetradores, víctimas si asumen un cierto grado de implicación o pueden mantenerse como testigos mudos, sordos o ciegos.
Siempre hay personas afortunadamente que mantienen la humanidad y luchan por los demás.
Irena Sendler (1910-2008) era hija de un médico. Estudió Derecho, Filología y Pedagogía, dedicándose sobre todo a la ayuda social dentro del Comité Ciudadano de Bienestar del Ayuntamiento de Varsovia. Este trabajo le permitió entrar y salir libremente del guetto de Varsovia y comprobar las condiciones de vida de los judíos. Formó parte del Partido Socialista de Polonia en la clandestinidad y sufrió torturas que le dejaron graves secuelas.
Al comprobar cómo vivían los judíos en el guetto Irena Sendler colaboró en la ayuda que se les prestaba desde fuera del mismo. Comprobó como por parte de diferentes instituciones judías se intentaba que la vida prosiguiera dentro de las peores condiciones de vida. Había organizaciones infantiles y juveniles, escuelas de enfermería e incluso una facultad de medicina clandestina. Colaboró en la organización Zegota que procuraba suministrar comida, ropa y cuidados a los judíos. Su nombre en la clandestinidad era Jolanta.
Es llamada "La madre de los niños del Holocausto" por haber salvado a 2500 niños de la muerte. Con grandes dosis de imaginación trasladó a niños desde el guetto de Varsovia a lugares protegidos. Los sacaban del guetto en cajas, sacos, a través de edificios, o agujeros. Una vez fuera se les daba un nuevo nombre y un lugar en el que esconderse: conventos, colegios, orfanatos o familias católicas. Irena Sendler mantenía un sistema de registro con el fin de conocer cual era el verdadero nombre del niño a fin de que una vez terminada la guerra, las familias pudieran reencontrarse. Las listas con los nombres de los niños se guardaban en unos botes escondidos bajo tierra.
En 1943 los nazis la detienen, pero a pesar de las torturas no desveló nada sobre los niños.
Terminada la guerra trabajó en diferentes instituciones sociales sufriendo incluso el menosprecio por parte de las autoridades comunistas, ya que ella pensaba que siempre se debía obrar en conciencia sin tener en cuenta las órdenes de otras personas o gobiernos.
En 1965 fue nombrada "Justa entre las naciones", título otorgado por el Estado de Israel a aquellas personas no judías que han salvado la vida de judíos durante el Holocausto. Hasta 1988 no pudo acudir a Jerusalén para plantar un árbol como todos los reconocidos como Justos entre las Naciones. No se le permitía salir de Polonia y no le facilitaba el pasaporte.
Fue candidata al Premio Nobel de la Paz en 2005, pero ese año el galardonado fue Al Gore.
"No se plantan semillas de comida. se plantan semillas de bondades. Traten de hacer un círculo de bondades, éstas le rodearán y las harán crecer más y más"
"Hay que estar siempre al lado del que se está ahogando sin tomar en cuenta su religión o nacionalidad. Ayudar cada día a alguien tiene que ser una necesidad que salga del corazón"
Las guerras y todo tipo de conflictos destapan siempre lo mejor y lo peor de las personas, y los médicos no podían ser menos. En este blog se analiza el papel que jugaron muchos médicos durante el nazismo poniendo de manifiesto que la maldad humana no tiene límites. Con el apoyo entusiasta de los médicos en la Alemania nazi, se esterilizó a deficientes, se asesinó a enfermos, y a todos los que podían ser inútiles (judíos, eslavos, enfermos, opositores politicos, homosexuales, gitanos...) y podrían hacer que degenerara la raza.
No obstante el ingenio y los conocimientos médicos siempre han servido y servirán para salvar vidas.
Los nazis consideraban a los judíos como portadores de enfermedades infecciosas y como generadores de las mismas. De ahí el interés en aislar, confinar, limpiar (términos médicos que encubrían el eufemismo de la exterminación total). También había otros colectivos de los que se pensaba era la máxima degradación humana además de los judíos: capitalistas, y comunistas.
A través del microscopio se ven gérmenes: judíos, capitalistas ($, libra) y comunistas
Judío siempre portador de tifus
En un campo de concentración o trabajo, la mínima sospecha de un caso de tifus podría llevar a la muerte a un barracón entero de cautivos. Dos médicos polacos al comprobar el pánico que tenían los nazis al tifus decidieron engañarles con el fin de salvar la vida de los judíos en un pueblo llamado Rozvadow . Se conoce en Medicina como reacción de Weil-Felix, el falso positivo al tifus que puede dar la sangre de pacientes infectados por otra bacteria, el proteus OX-19. Dicho de otra forma, ser portador de una bacteria a veces inocua, el proteus, hace parecer que una persona esté enferma de tifus, pero sin estarlo, ya que los análisis de sangre dan positivo aunque no se esté enfermo de tifus.
Los doctores Eugenisusz Lazowski y Stanislav Matulewicz inoculaban el proteus OX-19, luego hacían análisis del tifus y le enseñaban los informes a los nazis, los cuales a la vista de los mismos, se mantenían a distancia del pueblo. Lo chocante era que había demasiados enfermos de tifus y pocas defunciones.
Evidentemente se plantea un problema ético. Ambos médicos inoculaban una bacteria, que aunque pudiera ser inocua en ciertas condiciones en otras no lo es. Asimismo engañaban a las personas ya que no les decían lo que les estaban inyectando. Según se refiere en el siguiente artículo del British Medical Journal, además ambos doctores fueron capaces de engañar a una comisión de médicos nazis que acudió a comprobar la discordancia entre un gran número de casos de tifus y una mortalidad excesivamente baja. Gracias al ingenio de ambos pudieron salvarse en torno a 8000 personas.
"Yo no era capaz de pelear con un arma o con una espada, pero encontré una forma de asustar a los alemanes’’ Dr. E.Lazowski (1.913-2006)
En un post previo (7 de septiembre de 2010) se trató el tema de la T4 Aktion durante el nazismo. Esa mal llamada “eutanasia” supuso el asesinato sistemático y medicamente supervisado de 70.273 personas en 6 centros de exterminio (5 en Alemania y uno en Austria).
Mapa de los 6 centros de exterminio de enfermos y discapacitados
Las personas asesinadas eran: pacientes portadores de discapacidades, minusvalías, malformaciones congénitas, retraso mental, ciegos, sordos, inadaptados, delincuentes juveniles, alcohólicos, los que ingresaban frecuentemente en los hospitales y aquellos enfermos que no podían ganarse la vida ni tener un trabajo productivo.
Ha sido muy difícil conocer de primera mano lo sucedido en aquellos centros de exterminio, ya que las condiciones de los internos hacían difícil la comunicación con sus familiares. Se conoce el testimonio de una persona asesinada en Graefeneck
Martin Bader con su esposa y su hijo Helmut
Martin Bader
Martin Bader (Giengen 1901 – Grafeneck 1940) era un zapatero alemán que sufrió una encefalitis gripal y de resultas de la cual padeció a lo largo de su vida un síndrome de Parkinson postencefalitico. Ingresó en diferentes hospitales una y otra vez y buscaba trabajos con los que poder mantenerse él y a su familia. Han llegado hasta nosotros las cartas de desesperación que enviaba a su familia. El era perfectamente capaz de comunicarse y por ello dar testimonio de lo que sucedía allí. En sus cartas se indigna por estar ingresado en esos centros y en no poder trabajar.
Traslado de Martin Bader
Carta de condolencia recibida por la esposa de Martin Bader
Su esposa es informada que el 24 de junio de 1940 Martin Bader es trasladado a otro centro sanitario cuyo nombre no es desvelado. A los cuatro días es nuevamente informada a través de una carta del fallecimiento de su marido en el Centro Estatal de Graefeneck a cuasa de un ataque cerebral. En Graefeneck fueron asesinados mediante la inhalación de monóxido de carbono 9839 enfermos.
Tras las manifestaciones del Obispo de Münster y de otros miembros de la iglesia católica y evangélica, la T4 Aktion se ocultó. El hecho es que continuó hasta finalizada la II Guerra Mundial en una nueva fase de exterminio, denominada la “eutanasia salvaje”. Esta fase se realizó en instituciones localizadas en zonas muy apartadas con el fin de que no se conociera por parte de la población. A la “eutanasia salvaje” se le dedicará en su momento otro post.
La T4 Aktion sirvió como experiencia para el desarrollo de los asesinatos a gran escala en los campos de exterminio de: judíos, gitanos, prisioneros de guerra y cautivos enfermos.
En el video se cuenta la historia de Martin Bader y de otras victimas de la T4 Aktion.
A Martin Bader, zapatero alemán, le gustaba cantar en un coro, pasear por la montaña, y amaba a su familia. No era judío, no era gitano, no era mestizo, su único delito era ser un enfermo y una persona no productiva para el III Reich.
El siglo XIX vivió el máximo apogeo de los imperios coloniales. Un puñado de países se creía con el derecho de mandar en el mundo, imponer su cultura y aprovecharse de las personas y bienes de ciertos territorios. Era el momento del racismo biológico, todo ello generado desde las doctrinas eugenistas que proclamaban: “la mejora selectiva de la raza humana para evitar su degeneración y ulterior desaparición”.
Las colonias supusieron un laboratorio en el que poder experimentar diferentes medidas. Concretamente en la colonia alemana de Namibia se prohibieron los matrimonios entre blancos y negros. Se pensaba que la raza podría ser así cada vez más débil y degenerar. Eugene Fischer, médico y antropólogo, publicó estudios en los que defendía la supremacía de la raza blanca y la necesidad de su pureza con el fin de evitar la degeneración. Fue autor de una obra titulada: “Los bastardos rehoboter y el problema del mestizaje en seres humanos” (los rehoboter eran un pueblo mestizo de lengua afrikaans hijos de mujeres hotentote y europeos). Fischer estudió la herencia de los caracteres raciales en seres humanos según las leyes de Mendel.Este libro y otros como: “Enseñanza de la Herencia Humana y de la Higiene Racial”, cuyos autores además de Fischer fueron Lenz y Baur, fueron obras de cabecera de Hitler mientras cumplía pena de prisión en Landsberg a causa de un frustrado golpe de estado. Fischer además estableció que la tribu de los herero, en las colonias alemanas de África, no eran personas, sino animales. En Namibia ya se establecieron campos de concentración dónde fueron confinados esas tribus.
Eugene Fischer
Posteriormente E. Fischer fue Director del Instituto Káiser Guillermo de Antropología, Herencia Humana y Eugenesia.Tanto a partir de las obras de Fischer como de otros eugenistas como Ploetz, Rudin y Gobineau se fue dando forma a una seudociencia biológica que trataba de legitimar la solución biológica (esterilización, prohibición de uniones mixtas primero y asesinato después) a diferentes cuestiones sociales como la diversidad, diferencia, enfermedad. Si en siglos anteriores el colonialismo y el racismo tenían un componente religioso, en los últimos años del siglo XIX y principios del XX se constituyenen un fenómeno biológico para posteriormente pasar a ser una cuestióncultural.
Decía Fischer: “Sin excepción, cada persona europea que ha asimilado la sangre de razas inferiores ha pagado por esta absorción de elementos inferiores con degeneración intelectual, espiritual y cultural…" Las ideas de Fischer y otros eugenistas sirvieron para la promulgación de las Leyes de Núremberg, y otras dónde se prohibieron los matrimonios mixtos, y se tomaron medidas excluyentes con judíos, enfermos y diferentes. El objetivo era como siempre “que la raza alemana no degenerara” y para ello había que evitar el contacto con todo lo degenerado.
El final de las teorías racistas, eugenésicas, excluyentes y totalitarias es ya conocido. Millones de personas (enfermos, niños nacidos con malformaciones, discapacitados, judíos, homosexuales, gitanos, y opositores) pagaron con su vida el “ser diferentes”.
Recientemente en EL PAÍS se ha publicado un artículo acerca de las ideas ce ciertos dirigentes de la colonia española de Guinea Ecuatorial. Sus teorías en poco diferían de las de los anteriores. Según se refiere en el artículo se realizaron investigaciones con el fin de probar la inferioridad de los ecuatoguineanos y así negarles el acceso a la educación.
Entre 1933 y 1945 en la Alemania Nazi, algunos médicos y otros profesionales de la salud participaron en la esterilización y asesinato de pacientes portadores de enfermedades genéticas y mentales, de niños con malformaciones, en experimentos científicos realizados sin consentimiento y en el exterminio de otras personas en función de su condición religiosa, política, cultural o de identidad (opositores, judíos, gitanos, y homosexuales...).
En el momento actual siguen vigentes en la asistencia diaria de los pacientes los mismos aspectos éticos (límites de la investigación, decisiones al principio y final de la vida, relación del médico con el estado, investigación genética). Conocer este período oscuro de la medicina es necesario para evitar errores que avergüenzan a la humanidad en general y a los médicos en particular.